
El cuerpo, la carne,
el maldito cuerpo
y al final, ha sido esa sangre en vinagre.
Hoy arde el espíritu en mi espalda
cobarde
no encuentro agujero para esconder el miedo
que sibilino culebrea y
profana mi cuerpo
No estoy entero y tampoco
puedo … soltarlo
en
un soneto.
Mi alma hoy
no está para eso
solo sé que te quiero y me acuerdo
tengo tanto frío y me da miedo
esto que siento.
Es tanto lo que tengo
y revivo y,
reconecto a cada poco
en los trozos de estos versos.
No pierdo más tiempo y contigo
a mi lado
en este rincón
del cuerpo.
MUNCHO GÜENO
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Llamitas de fuego pa’ ti.
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Me alegro de que te hayan llegado mis versos. Saludos.
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Nos puedo admiraré más, y quereres tampoco
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Mil gracias bonita.
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Ole, ole y ole. Un emotivo y precioso poema.
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Muchas gracias Juan. Todo un honor de tu parte.
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